39J: Desarrollo sustentable y desperdicio de alimentos

CAME Sustentable, una valiosa iniciativa

Se trata de una herramienta que permite mejorar la calidad de los procesos productivos, y también para la minimización de impactos negativos y maximización de los positivos sobre el entorno social, cultural y ambiental.

La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), lanza una certificación para impulsar el Desarrollo Sostenible de las empresas argentinas.
El sello CAME Sustentable es un estándar de Triple Impacto -crecimiento económico con conciencia social y cuidado ambiental-, único en su tipo en Latinoamérica.
CAME Sustentable acompaña a las empresas argentinas en su proceso de adaptación a los nuevos parámetros de producción y consumo, exigidos en mercados que son cada vez más competitivos.
La certificación creada por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa está fundamentada en los principios del Triple Impacto y alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.
El principal objetivo de esta acción es verificar el cumplimiento de los requerimientos de la demanda nacional e internacional.
Estos requerimientos están relacionados con el desempeño ambiental, la protección de los Derechos Humanos, la inocuidad y la trazabilidad, entre otros.

Calidad de los procesos productivos

Entre las principales características de esta herramienta -que ya cuenta con empresas certificadas en diferentes puntos del país-, la entidad gremial empresaria que representa a las PyMEs argentinas, destaca que permite una mejora en la calidad de los procesos productivos, aportando criterios no solo para la eficiencia en el uso de los recursos, sino también para la minimización de impactos negativos y maximización de los positivos sobre el entorno social, cultural y ambiental.
CAME Sustentable es una certificación de tercera parte -cuyas auditorías son realizadas por entes acreditados internacionalmente- y se destaca por múltiples beneficios como: acompañamiento y asesoramiento técnico durante el proceso de implementación, vinculación con socios estratégicos nacionales e internacionales, asesoramiento en líneas de financiamiento y mentorías, y acceso a cursos de formación gratuitos, entre otras ventajas.
Todas las empresas argentinas -independientemente de su tamaño-interesadas en ampliar sus criterios en relación al Desarrollo Sostenible, pueden llevar a cabo esta validación que considera entre sus requisitos a las Buenas Prácticas, además de estándares de Derechos Humanos, sistemas de gestión ambiental y social, calidad y mejora continua, entre otros.

Experiencia en primera persona

En los últimos meses, CAME otorgó certificaciones a pequeñas y medianas empresas de diversos sectores como el lácteo y el olivícola, por mencionar algunos, cuyos procesos productivos cumplen con los protocolos específicos de cada actividad.
Una de las dos primeras empresas en participar y alcanzar el sello fue la firma cordobesa Capilla del Señor (CDS), radicada en Villa María.
Esta empresa familiar, nacida en el año 2006 con la idea de agregar valor a la materia prima y buscar un diferencial dentro del sector, industrializa y comercializa productos lácteos. En la foto Alvaro Ugartemendia, gerente general de la PYME, con parte de su equipo. “Elegimos certificar el sello CAME Sustentable porque nos brinda la posibilidad de seguir trabajando en una mejora continua de nuestra gestión, tanto interna como externa”, aseguró Alvaro Ugartemendia, gerente general de CDS.

 

Por otra parte, la PyME sanjuanina El Desafío del Inmigrante, fundada en 2008, obtuvo el sello por su proceso de producción de aceitunas.
Su socia gerente, Adriana Garde, destacó el valioso acompañamiento técnico brindado por CAME durante todo el proceso.
Sobre la certificación, la empresaria sanjuanina aseguró: “Al cliente le da tranquilidad saber que detrás del producto existe un gran trabajo y responsabilidad”. Imagen: Adriana Garde, responsable de la empresa sanjuanina.